El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó el viernes su profunda tristeza tras el mortal tiroteo ocurrido en una escuela secundaria en Texas, calificándolo de "absolutamente horrible".
"Esto ha estado ocurriendo durante demasiado tiempo en nuestro país", dijo, asegurando que su administración estaba decidida a hacer "todo lo que esté a su alcance" para proteger a los estudiantes y garantizar que "aquellos que representan una amenaza para ellos y para otros" no puedan portar armas. "Día muy triste, muy, muy triste", dijo.